Este modelo de negocio, que en Japón ya forma parte de la cotidianidad, se basa en minimizar los costos y gastos para la empresa y por ende para el usuario. Es el negocio que todos buscan: menor costo y mayor margen de ganancia, aseguraba Ovalle, fundador y CEO de CAPS Future Rooms.
En Colombia ya avanza un proyecto de hoteles en cápsulas en Bogotá, se trata de ofrecer un lugar para dormir, sin mayores lujos pero atendiendo las necesidades de los usuarios.
El hotel cuenta con dos modelos de cápsulas unipersonales. La estándar de 85 centímetros de ancho por 85 centímetro de alto y 2 metros de largo (el tamaño de una cama sencilla con techo). Y la VIP de 1 metro de ancho por 1 metro de alto y 2 metros de largo, a diferencia de la primera, esta habitación cuenta con una repisa, ventilador y una tablet.
Contrarrestando el espacio de los dormitorios, el hotel cuenta con espacios comunes como: lobby, sala de televisión, cafetería, bar y baños. Así mismo hay lockers donde los visitantes pueden dejar sus maletas.
“Pese a que es un espacio pequeño, las instalaciones son de muy alta calidad y muy cómodas”, afirma Ovalle. La empresa está pensando en construir cápsulas bipersonales, una decisión que surge de las observaciones que le han hecho personas allegadas e inversionistas que han planteado esta necesidad.