En esta ocasión conoceremos un poco la Ciudad de Zacatecas, ubicada en el centro de México.
Fue fundada en septiembre de 1546, a partir del descubrimiento de las minas de plata por Juan de Tolosa. Gracias a su posición estratégica, los beneficios de la minería de plata y su riqueza mineral, aportó considerables ingresos a la Corona Española. Es por eso que esta ciudad fue considerada la segunda más importante de Nueva España, denominada “Muy Noble y Muy Leal Ciudad de Zacatecas” por el rey Felipe II en 1588.
En 1993, su centro histórico fue nombrado por la UNESCO como Patrimonio Cultural de la Humanidad. La razón para incluir este espacio urbano se debe a sus elementos culturales, numerosas fachadas barrocas y su proyección armónica. Hasta el día de hoy se preservan monumentos coloniales como la Catedral de Zacatecas (que data del año 1752), el Teatro Calderón (construcción de finales del siglo XIX), el Portal de Rosales, el cerro de la Bufa y una amplia gama de museos.
Zacatecas se considera la segunda ciudad con más museos del país, después de la Ciudad de México. Algunos de los más importantes son el Museo Rafael Coronel (del siglo XVI) que cuenta con la colección de máscaras más grande del mundo; el Museo Pedro Coronel, que contiene obras egipcias, griegas, romanas, indias, chinas, japonesas, mayas, aztecas y africanas, así como pinturas de Pablo Ruiz Picasso y otros grandes artistas; y el Museo de Arte Abstracto Manuel Felguérez, considerado el museo de arte abstracto más importante de Latinoamérica.
Uno de los atractivos principales para tener una vista de Zacatecas, es el teleférico que pasa por encima de la ciudad, uniendo al Cerro de la Bufa con el Cerro del Grillo y la Mina El Edén. Por debajo de la ciudad podemos conocer la famosa y atractiva Mina del Edén, que se encuentra a más de 350 metros de profundidad y presenta dioramas, recorridos, paseo en un carro minero, museo de rocas y minerales. De noche se transforma en la discoteca “El Malacate”.
Por último, tampoco podes perderte en tu visita a Zacatecas la tradicional Callejoneada, la alternativa perfecta para conocer la ciudad por dentro. Esta tradición se remonta a los primeros años del Apogeo, cuando los trabajadores de las minas festejaban un día más de vida dando estos recorridos, luego de salir de trabajar. Con el tiempo esta actividad se fue consolidando hasta el día de hoy, al punto de formar parte de las experiencias que este popular destino ofrece. Todos los sábados, los turistas se congregan en los encantadores callejones de la ciudad, deteniéndose en algunas de las muchas plazas, acompañados del tradicional tamborazo y la popular bebida: el mezcal.