EasyJet, la aerolínea británica de bajo costo se platea el despido de 700 pilotos y el cierre de tres bases en el Reino Unido: Stansted, Southend y Newcastle; no obstante seguirán prestando servicio de vuelos en estos aeropuertos.
Johan Lundgren, director ejecutivo, señalaba que se trata de propuestas muy difíciles de presentar en este momento tan complicado, pero la aerolínea pretender “hacer lo correcto” para asegurar el éxito a largo plazo y proteger los empleos en el futuro.
En el pasado mes de mayo, la aerolínea había anunciado recortes en su plantilla que afectarían a 4.500 empleados, como consecuencia de la crisis provocada por la actual pandemia.
A pesar de que han comenzado a trasladar pasajeros, los cálculos de la aerolínea presumen que no alcanzarán los niveles de demanda anteriores a la crisis hasta el 2023.