Diferentes entidades del sector privado de México, entre ellas la Asociación de Hoteles de Cancún y Puerto Morelos; realizaron una propuesta con el fin de controlar la capacidad y seguridad sanitaria de las playas del país, solicitando que el uso de las mismas se restringiera exclusivamente a los huéspedes de las propiedades que cuentan con las concesiones de esas playas.
Frente a esto, el secretario de Turismo de México, Miguel Torruco Marqués, afirmó: “En México no hay playas privadas, son de todos los mexicanos. La posición de la Secretaría de Turismo sobre este tema es muy clara: las leyes se tienen que cumplir, todos por igual, así que las playas mexicanas ni se privatizan, ni se restringe su ingreso a ningún ciudadano de este país”.
El funcionario sostuvo que sus palabras tienen el respaldo del presidente Andrés Manuel López Obrador y que los bienes nacionales son de uso público, bajo las modalidades determinadas por las leyes vigentes. Por otro lado comentaba que los protocolos a implementar serán los que determinen las autoridades sanitarias, encabezadas por la Secretaría de Salud y deben ser aplicadas a todo el público en general, sin distinción.
En cuanto a las medidas a cumplir podemos mencionar:
- El acceso y la afluencia de personas se implementará a partir de los niveles de riesgo del “semáforo de riesgo COVID-19”. Para ello, se controlarán los siguientes niveles de aforo: 25% para el nivel de riesgo máximo (rojo); 50% para el nivel de riesgo alto (naranja); 75% para el nivel de riesgo medio (amarillo); y acceso total para el nivel de riesgo bajo (verde).
- Se suspenden las reuniones grupales y cualquier actividad que aglomere varias personas.
- Siempre que sea posible, habrá que establecer filtros en todos los accesos y colocar gel antibacterial en varios puntos.
- Brindar información y buscar mecanismos para garantizar la sana distancia en cada nivel de riesgo, siempre que sea posible.
- En el caso de la venta de productos al turista (alimentos, bebidas, etc.), se debe atender al público a una “sana distancia” de por lo menos dos brazos; tratar de hablar y acercarse sólo lo necesariamente indispensable; y contar con gel antibacterial para aplicarlo en las manos constantemente.
- Se deberá incrementar la limpieza (con agua, jabón y solución desinfectante) y el mantenimiento de las instalaciones en general y muebles (camastros, sillas y camas de playa, mesas, sombrillas, etc.).
- Los servicios sanitarios deben contar con: papel higiénico, agua potable, jabón antibacterial para lavado de manos, alcohol en gel y toallas de papel para el secado de manos.
Sin embargo, esto no despeja la incertidumbre de saber cómo se controlará el cumplimiento de los límites de turistas en las playas si los hoteles no tienen el manejo de la capacidad. ¿Esta polémica llego a su fin o recién empieza?