A diferencia de la mayoría de las plataformas digitales, con la pandemia, el negocio de Despegar se desplomó. Las cancelaciones de viajes internacionales, las medidas restrictivas establecidas por diferentes gobiernos y el prolongado impacto del COVID-19 en América Latina, generaron una caída del 92% de las transacciones y 96% de las reservas entre abril y junio comparadas con el mismo trimestre de 2019.
Para sobrevivir a dicha situación, Despegar, la agencia de viajes on-line líder de América Latina, estableció diferentes estrategias. En primer lugar, emprendió una reducción de costos a través de despidos y la tercerización de su call center.
Por otro lado, la principal amenaza de Despegar no son las otras plataformas de viajes y turismo, sino que las gigantes digitales de Wall Street como Google que incursiona en el mercado turístico. Pero a diferencia de Despegar y las demás plataformas de viajes, Google no incursiona en estos negocios para generar ingresos por comisiones por pasaje vendido u hotel reservado, sino que para integrar fuentes adicionales de datos a sus ya múltiples y diversas bases de big data. Como consecuencia, que el negocio para las gigantes digitales sean los datos resulta en la principal debilidad de Despegar, debido a que pueden utilizar esos datos para entrar a competir eficazmente.
No obstante, para diversificar su acceso a datos y generar liquidez, Despegar remarcó a sus accionistas que los tiempos de crisis son los mejores para comprar otras empresas a precios muy por debajo de su valor. Tal es el caso que en 2019 había anunciado la compra de Best Day y que finalmente renegoció los términos de la compra en junio ante la pandemia. Asimismo, aprovechó la pandemia y adquirió una fintech brasilera, empresa brasilera líder en el mercado de pagos electrónicos sin tarjeta, llamada Koin. Esta adquisición le permitirá a Despegar un acceso más diversificado a fuentes exclusivas de datos, en este caso, de capacidades de pago y crédito.