Jean Baptiste Djebbari, secretario de Estado de Transporte, informó que el gobierno ha aceptado propuestas para establecer instalaciones de pruebas de antígeno COVID-19 en los aeropuertos de Francia, comenzando por lo de la capital.
Desde el próximo 26 de octubre, los pasajeros que partan desde los dos principales aeropuertos de París, Charles de Gaulle y Orly, deberán someterse a una prueba rápida de antígenos a la salida. De acuerdo a algunos medios franceses, Djebbari aclaró que las pruebas estarán disponibles especialmente para salidas a destinos como Estados Unidos o Italia, y para llegadas desde zonas rojas, con el fin de garantizar test para todos los pasajeros procedentes de áreas de alto riesgo.
Las pruebas de antígenos, a diferencia de las pruebas genéticas, funcionan detectando proteínas en el virus. Generalmente se pueden realizar en 15 minutos, son más económicas que las pruebas PCR y no requieren la misma infraestructura, pero la desventaja es que no son tan precisas, especialmente en casos asintomáticos.