El presidente de República Dominicana anunció que desde el miércoles 16 de febrero el Gobierno nacional suspendió todas las restricciones que estaban vigentes a nivel interno para contener el COVID-19. Desde ahora, tanto los dominicanos como los turistas internacionales, ya no será obligatorio el uso de mascarillas, ni se exigirá tarjeta de vacunación para el ingreso a espacios públicos, como tampoco se limitarán más los aforos.
La medida se sustenta en los altos niveles de vacunación, pero de ningún modo ha finalizada la pandemia. Por el contrario, se seguirá trabajando para que todos completen su esquema de vacunación y para que haya disponibilidad permanente de dosis y camas ante cualquier eventualidad.
En las últimas semanas se produjo una importante baja en la cantidad de contagios y la tasa de mortalidad es una de las más bajas del planeta, mientras que la ocupación de camas de terapia intensiva está en niveles sumamente controlables.