En el océano Pacífico, a unos 132 kilómetros del Puerto de San Blas, en el estado mexicano de Nayarit, se encuentran las Islas Marías: un archipiélago que en 1905 comenzó a albergar un complejo penitenciario federal. En 2005 las islas fueron declaradas Patrimonio Natural de la Humanidad por la Unesco y ahora el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, dispuso una transformación cultural y ambiental del territorio. En julio, el nuevo destino comenzará a recibir al turismo, ahora convertida en un centro cultural y eco-turístico
Los ferris con turistas partirán hacia las Islas Marías desde Mazatlán (3 horas de viaje) y San Blas 2,5 horas) y en el futuro se sumará una salida desde Boca de Chila. También está previsto ampliar el aeropuerto de la Isla Madre y que aterricen aviones de hasta 40 pasajeros.
Dado que es un Área Natural Protegida no se podrán construir edificios ni hoteles, pero se están reconstruyendo las viviendas e instalaciones existentes. Serán habitaciones cómodas y con todo lo necesario y los alojamientos lo manejará el Gobierno Federal, aunque se autoricen 900 personas por día no todos podrán quedarse a dormir. La intención es que sea un proyecto sostenible y que la gente pueda pernoctar máximo dos días. Habrá restaurantes, tiendas para comprar recuerdos y muchos productos interesantes vinculados con la naturaleza
El recorrido por las Islas Marías se estructurará en ocho experiencias que ya fueron presentadas a los operadores turísticos, agencias de viajes y guías. El objetivo es que los visitantes puedan conocer la historia de más de 100 años del sistema penitenciario en México, y descubrir lo que fue una isla prisión, desde el puesto de vigilancia en la zona de Pichilingue hasta el Faro.
Dada su riqueza, no están permitidas actividades como la pesca, la explotación de especies de flora y fauna, explotación minera, introducción de especies invasoras y el aprovechamiento forestal.