En plenas vacaciones de invierno, el Gobierno argentino habilitó la realización de viajes grupales dentro del territorio, pero con fuertes restricciones. No se autorizo el turismo estudiantil y las salidas de jubilados, los contingentes podrán ser de hasta diez pasajeros; y sólo a destinos que no se encuentren en Alarma Epidemiológica y Sanitaria.
La medida se concretó este miércoles 21 de julio, con la publicación en el Boletín Oficial de la Decisión Administrativa 723/2021, que actualiza los parámetros para establecer en qué categoría epidemiológica se encuentra cada destino y establece algunas flexibilidades en las restricciones vigentes.
Los viajes grupales deben tener “como ciudad de origen y destino localidades que no sean consideradas en ‘Situación de Alarma Epidemiológica y Sanitaria’”. Además, esas salidas se deben originar y culminar en “terminales de ómnibus debidamente habilitadas o en lugares en los que se realice control de temperatura y encuesta de síntomas”, de acuerdo a lo establecido por los protocolos oficiales.
Tanto en los viajes de egresados como en las salidas de los jubilados existe un importante riesgo, ya que los jóvenes todavía no han comenzado a ser vacunados con el lote de Moderna recién arribado de EEUU; y muchos jubilados (mayormente inoculados con la Sputnik, todavía esperan su segunda dosis para completar el esquema.
Tampoco están autorizados a participar de esos grupos aquellos pasajeros que hayan sido contacto estrecho de un caso confirmado de COVID-19 durante los 14 días previos al viaje o hayan tenido un diagnóstico positivo de COVID-19 en el mismo período.
En el mismo sentido, el artículo 2° flexibiliza las restricciones en los destinos de Alto Riesgo Epidemiológico y Sanitario, las cuales ahora podrán realizar reuniones sociales en domicilios de hasta diez personas; reuniones de hasta 50 personas en espacios públicos; y prácticas deportivas en establecimientos cerrados (hasta el 50% de capacidad).
Asimismo, quedan habilitados los casinos y bingos para funcionar al 50%; “la realización de todo tipo de eventos culturales, sociales, recreativos y religiosos en lugares cerrados, con un aforo del 50%; y el funcionamiento de cines, teatros, clubes, gimnasios, centros culturales y otros establecimientos afines, también con la mitad del aforo máximo».
Finalmente, los locales gastronómicos podrán funcionar hasta las 0.00 horas, lo que otorga mayor oxígeno a uno de los sectores más golpeados por la crisis.