OceanAir, que entre 2010 y 2019 usó el nombre de Avianca Brasil, es una compañía independiente de la colombiana Avianca Holdings S.A., y se acogió a la ley de quiebras en 2018 pero no pudo superar la fase del proceso conocida como recuperación judicial, en la que las empresas buscan alternativas para no declararse en bancarrota.
El bufete Thomaz Bastos & Waisberg Kurzweil Advogados, presento la petición al Tribunal de Justicia del Estado de Sao Paulo, de declarar a la aerolínea en quiebra, ante las dificultades que tiene para hacer frente al pago de sus deudas.
Un año atrás, la aerolínea subastó los slots en un intento por la recuperación judicial amparada en la Ley de Bancarrotas, no obstante no pudo recibir los 147 millones de dólares de la venta a Latam Brasil y Gol, porque la subasta no obtuvo la aprobación definitiva por la ANAC y esos recursos, que serían destinados al pago de acreedores, nunca llegaron a la compañía.
El Consejo Administrativo de Defensa Económica (CADE), órgano de combate a los monopolios, advirtió en abril de 2019, antes de la subasta, sobre los riesgos existentes para la competencia leal en el mercado de transporte aéreo con la venta de los activos de Avianca Brasil.
Con la nueva petición, la compañía aérea solicitó un plazo de 60 días para presentar una lista de los activos que serán rematados por la Justicia para subsanar parte de las deudas con los acreedores.