El Gobierno canadiense anunció este viernes que volverá a permitir los vuelos directos procedentes de 10 países africanos, que fueron prohibidos después la aparición de la variante ómicron tras la confirmación de que en Canadá ya se está produciendo transmisión comunitaria a gran escala de la nueva cepa del virus.
También se volverá a instaurar la necesidad de que todas las personas que lleguen al país por vía aérea tengan una prueba molecular negativa (PCR) realizada en un plazo máximo de 72 horas antes de viajar al país.
Debido a la propagación de la variante ómicron, todas las provincias del país están implementando nuevas restricciones de cara a las fiestas navideñas y el Gobierno federal aconsejó esta semana que los canadienses cancelen todos sus viajes internacionales considerados no esenciales.