China eliminará la exigencia de cuarentenas para entrar en el país a partir del próximo día 8 de enero, una medida que estaba vigente desde marzo de 2020. No obstante, los viajeros tendrán que presentar una prueba PCR negativa realizada en las 48 horas previas al comienzo del viaje. Además, se retirarán los límites al tráfico aéreo internacional.
La Comisión Nacional de Sanidad de China ha declarado que la COVID dejará de ser una enfermedad de categoría A, el nivel de máximo peligro y para cuya contención se exigen las medidas más severas, para convertirse en una de categoría B, que contempla un control más laxo.
Además, la Comisión señaló que se «optimizarán las gestiones» para facilitar visados a ciudadanos extranjeros que quieran visitar China por razones de «negocios», «estudios» o «visitas familiares», tras más de dos años en los que la concesión de permisos de viaje a China se ha visto limitada.