Después de mejorar la situación epidemiológica de COVID-19 en Europa y muchas partes del mundo, 24 países de la Unión Europea/Espacio Económico Europeo han levantado sus reglas y medidas especiales de entrada de cara al verano 2022, permitiendo a partir de julio las llegadas desde casi cualquier país, sin restricciones (Austria, Bélgica, Bulgaria, República Checa, Croacia, Chipre, Dinamarca, Estonia, Finlandia, Grecia, Alemania, Hungría, Islandia, Irlanda, Italia, Letonia, Lituania, Noruega, Polonia, Rumania, Eslovaquia, Eslovenia, Suecia y Suiza). Sin embargo, cuatro países del bloque mantienen algún tipo de estas medidas, España entre ellos.
España aún requiere que los ciudadanos de países no pertenecientes a la UE cumplan con ciertas reglas de entrada. El Ministerio de Sanidad español ha establecido para todos los viajeros de terceros países la presentación de un certificado de vacunación -siempre que acredite que el titular ha completado la vacunación primaria en los últimos nueve meses o ha recibido una vacuna de refuerzo-, recuperación o prueba a su llegada a España y para todo tipo de propósitos
Francia actualmente aplican diferentes reglas de entrada según el país de origen, estableciendo categorías verde y naranja. Los que no dispongan de un certificado deben someterse a PCR o test de antígenos a su llegada
Los Países Bajos mantienen las restricciones de entrada por la COVID-19 solo para los viajeros de terceros países. Hay exenciones a la prohibición de entrada para los que proceden de países considerados seguros, o tienen certificado de vacunación o recuperación.
Malta exige a todos los viajeros que llegan una prueba válida de coronavirus y presentar un certificado COVID-19 de vacunación, recuperación o prueba. Este requisito no se aplica a los menores de 12 años.