El Aeropuerto Josep Tarradellas Barcelona-El Prat ha recuperado la operatividad total de sus terminales, después de que haya entrado en servicio el nuevo dique sur en la Terminal T1, que permitirá acoger aviones de grandes dimensiones.
La apertura del dique sur de la Terminal T1 se ha llevado a cabo tras las obras de remodelación que finalizaron en abril de 2021, en las que Aena realizó una inversión de 48,2 millones de euros incluidos en el primer Documento de Regulación Aeroportuaria (DORA I) para el quinquenio 2017-2021.
«Tras esta renovación, el aeropuerto dispone ahora de cinco nuevas posiciones de contacto para aeronaves de rutas intercontinentales y tres niveles para separar el flujo de pasajeros: las salidas y llegadas de vuelos nacionales y Schengen se harán en el nivel inferior, las llegadas de pasajeros no-Schengen por el nivel intermedio y el nivel superior será la zona de embarque para salidas de vuelos no-Schengen», explica el gestor aeroportuario.
El dique sur no es el único espacio que la Terminal T1 ha recuperado estos últimos días. A principios de mayo también se procedió a la reapertura del extremo B3 del dique longitudinal, que dispone de un local comercial, aseos y más de una decena de puertas de embarque.
Finalmente, el martes 24 de mayo fue prevista la reapertura de la Terminal T2C y de los módulos M y R de la Terminal T2B, tras más de dos años cerrados por reformas y por la irrupción de la COVID-19. Con estas medidas, se completará la reapertura de todos los espacios operativos del aeropuerto barcelonés.