Según un estudio realizado por el Departamento de Defensa de Estados Unidos, el riesgo de contagio de coronavirus a bordo de aviones durante los vuelos es muy bajo y «casi inexistente”. Como consecuencia, este hecho es una señal positiva para las aerolíneas en su intento de recuperarse del impacto devastador.
El estudio fue realizado a bordo de aviones modelos Boeing 777 y 767 de United Airlines y demostró la importancia de utilizar mascarillas ya que ayudan a minimizar la exposición a infecciones cuando alguien tosía. Asimismo, aproximadamente el 99,99% de las partículas fue filtrado fuera de la cabina en 6 minutos debido a la rápida circulación de aire, la ventilación de aire hacia abajo y los sistemas de filtración de la aeronave.
Por otro lado, el estudio indicó que un pasajero necesitaría volar 54 horas continuas en un avión con una persona infectada para recibir una dosis infecciosa.
«Estos resultados significan que las posibilidades de exposición a la COVID en un avión de United son casi inexistentes, incluso si su vuelo está lleno», dijo Toby Enqvist, director de atención al cliente de la aerolínea estadounidense.
«Cuando un pasajero en su asiento usa una mascarilla, solo un promedio del 0,003% de las partículas de aire dentro de la zona de respiración, alrededor de su cabeza, son infecciosas, incluso cuando todos los asientos están ocupados», concluye la investigación.