La variante ómicron ha golpeado al personal de las grandes aerolíneas y ha causado la cancelación de casi 5.000 vuelos en todo el mundo durante los días de Nochebuena y Navidad, cuando millones de personas viajan para reunirse con sus familias. Durante el domingo 26 se sumaron 2.316 vuelos suspendidos, mientras que 8.071 han sufrido retrasos.
Más de un cuarto de los vuelos cancelados durante Nochebuena y Navidad tenían como destino o punto de partida Estados Unidos (EEUU), donde los casos han crecido un 50% en la última semana tras el arrollador avance de ómicron. Delta ha atribuido las cancelaciones a ómicron, pero también a las condiciones meteorológicas con tormentas de nieve que amenazan al oeste de EEUU, desde el estado de Washington hasta el sur de California.
Mientras las aerolíneas tienen problemas para mantener sus planes de vuelo, la mayoría de los viajeros de EEUU han seguido con sus planes para viajar estas fiestas, según reflejan los datos de la Administración de Seguridad del Transporte de EEUU. Unos 2,2 millones de personas transitaron por los aeropuertos estadounidenses el jueves, justo antes de Nochebuena, lo que supone casi los mismos que en 2019 y tres veces más que el año pasado.
La variante ómicron ha provocado un aumento de contagios en todo el mundo y ha hecho que algunos países europeos, como Alemania, Portugal y Finlandia, vuelvan a imponer restricciones en los sectores del ocio y la hostelería.