La consultora Bain & Company brindó una proyección más alentadora que la industria sobre la recuperación del transporte aéreo. En un escenario positivo, para abril del 2022 se estima que las aerolíneas recuperen los niveles presentados durante el 2019. Esto indica, sin dudas, una gran oportunidad para reinventarse.
Según la industria, la recuperación de la aviación y la demanda de pasajeros se evalúa que siga por debajo de los alcanzados el año pasado hasta después de junio del 2024. Pero Bain & Company presentó una perspectiva mucho más optimista y alentadora: abril del 2022.
La reactivación de los vuelos aéreos depende de algunos factores inciertos como: la duración de la pandemia, la recesión económica global y el tiempo que los gobiernos del mundo mantengan cerradas las fronteras de sus respectivos países. Por lo tanto, las aerolíneas tienen un nuevo desafío para afrontar esta situación: reinventarse junto a la innovación.
Ahora, el proyecto que tienen por delante las aerolíneas es disminuir los temores de sus pasajeros, haciendo hincapié en la confianza y en la buena comunicación de las medidas a adoptar. “Hoy es el momento correcto para transformar el negocio de las aerolíneas y aeropuertos. Esta crisis trae consigo una oportunidad real para la innovación”, dijo René Armas Maes, consultor de líneas aéreas.