A raíz del aumento de la propagación del COVID-19 a través del contacto o las superficies compartidas, gran parte del mundo comenzó a interesarse en productos sin contacto dando inicio a una nueva revolución en la forma en la que interactuamos con las tecnologías de la vida cotidiana.
Según las búsquedas de Amazon, los productos que permiten evitar el contacto como sensores y nuevas tecnologías para la vida diaria en interiores, han aumentado hasta en un 2000%. Estas tecnologías ofrecen una solución potencial para las oficinas u organizaciones que luchan por mantenerse en funcionamiento sin aumentar el riesgo de propagación viral.
A medida que el COVID-19 incita a los ciudadanos a comprar tecnologías sin contacto en números sin precedentes, ¿es posible imaginar que estas tecnologías pronto serán parte de nuestra vida cotidiana? El sector de los productos sin contacto aún es pequeño, pero rápidamente podría impulsar una mayor automatización de la arquitectura contemporánea a cualquier escala.
Algunos ejemplos de tecnologías sin contacto son: el uso de aplicaciones de teléfonos inteligentes para controlar la iluminación, la temperatura, y la seguridad, entre otros aspectos; la iluminación activada por movimiento; baños inteligentes que no sólo descargan automáticamente a través de un sensor y temporizador, sino que también se abren y se cierran automáticamente; acceso vía bluetooth, entre otros.
¿Te imaginas una vida sin contacto?