Después de evaluar la situación epidemiológica actual en el país y teniendo en cuenta el aumento de las tasas de vacunación, el Gobierno austríaco informó que a partir del pasado 5 de marzo, tanto los visitantes internacionales como los residentes de Austria ya no están sometidos a restricciones por la COVID-19 ni obligados a seguir la gran mayoría de las medidas de protección
Las autoridades han precisado que, exclusivamente, se mantienen dos medidas: el certificado COVID digital de la UE a la llegada y el uso de mascarillas FFP2 en el transporte público y en comercios de primera necesidad.
Esta flexibilización de medidas supone que todas las personas podrán entrar en todo tipo de establecimiento, bien se trate de alojamiento, restaurantes, cafeterías, instituciones culturales o centros de ocio, sin tener que presentar un certificado válido de vacunación o recuperación. Tampoco se requerirá de una prueba COVID-19 negativa.
Certificado para entrar
- Actualmente, pueden entrar todos los viajeros que posean un certificado válido que demuestre que el titular se ha recuperado, vacunado o ha dado negativo recientemente.
- Para los certificados se puede usar la aplicación NHS Covid o el EU COVID Pass. También se aceptan versiones impresas y certificados médicos de vacunación o recuperación
- Un certificado de vacunación se considera válido al llegar a Austria siempre que el documento indique que el titular ha completado la vacunación con una de las vacunas aceptadas en los últimos 270 días. Quienes hayan sido vacunados hace más de nueve meses necesitan haber recibido una vacuna de refuerzo
- Un certificado de recuperación se reconoce solo si el titular ha padecido la enfermedad en los últimos 180 días.
- Los viajeros que no tengan un certificado de estas condiciones deberán seguir las reglas de autoaislamiento a su llegada y están obligados a registrar su entrada en la autorización previa al viaje.