En el centro de la provincia de Mendoza, a 235 km de la capital y bendecida por los ríos Atuel y Diamante, se encuentra San Rafael, un destino ideal para descansar y disfrutar en una tierra pródiga en bellezas naturales.
Un típico circuito para descubrir la ciudad nos llevará a recorrer diferentes atractivos turísticos como la Catedral San Rafael Arcángel, de arquitectura renacentista, rococó colonial y español; la hermosa y reluciente Plaza Gral. San Martín; el monumento ecuestre del Padre de la Patria; la plazoleta del Inmigrante a un costado de la antigua Estación de Ferrocarril; la Plaza Francia, con su enorme fuente de agua y su paseo comercial; y por último, el Parque Hipólito Yrigoyen donde se encuentra emplazado el monumento al Gaucho Argentino.
Pero, ¿que podemos hacer en San Rafael? San Rafael lo tiene todo! Si el viajero desea pescar, entonces puede pescar pejerrey en el Nihuil. ¿Le gusta la aventura? Haremos rafting en el Atuel. ¿Desea sorprenderse? Iremos a Valle Grande y nos deslumbraremos con sus increíbles vistas panorámicas. ¿Busca experiencias sustentables y hacer turismo enológico? Las bodegas más importantes abren sus puertas y lo invitan a descubrir los secretos de sus viñedos. ¿Gusta de la gastronomía cuyana? Entonces, en San Rafael, nos esperan sabrosos chivitos y costillares a las brasas, tradicional carne a la masa, jamón crudo y su particular sabor, empanadas, la popular torta frita y platos gourmet o de cocina internacional.
¿Algo más de San Rafael? Si… solo falta conocer este increíble oasis de Mendoza.